martes, 11 de octubre de 2011

Disquisiciones con la luna

Que mi DNI no es mi ADN. Soy de tumba incierta, buceo al otro lado del viento, por eso voy a ratos desposeído de memoria, mimbreño de certezas, acelerado de promesas, lúcido de Ayes como Vallejo, ligero en días lentos como Machado, entrambos hermanos poetas.
Que pregunten por mí a la noche o al jazmín. Un olivo de mar de mirada perdida. Alegre como un pájaro que no sabe del porvenir, pero en círculos ha volado sin desmayo los almiares ardidos. El dulce reidor de sí mismo (sólo es timidez y sonrojo). Eterno enamorado del amor.
No estoy junto al meapilas o al santero, ni aliento al cerebral o al ceremonioso. Aún creo en la amistad y sus purgatorios. Creo en el descreimiento, en la sana alegría, en sábanas rieladas de plateado lunar.
Soy de tumba incierta, buceo al otro lado del viento, por eso voy a ratos desposeído de memoria, acelerado de promesas, lúcido de Ayes como Vallejo, ligero en días lentos como Machado, entrambos hermanos...

( Extracto del Diario de un poeta alejandrino)


*Leonard Cohen, en su discurso al recibir el premio Fundación Príncipe de Asturias en Oviedo (21 0ctubre 2011) pronunció : "Un hombre no es un DNI". Gracias Cohen por tu emotiva respuesta a la recepción del Premio. Y por esta Cohesionada conectividad.

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